Biografía de Johann Gottlieb Fichte

¿Quién fue Fichte?

Johann Gottlieb Fichte (1762 – 1814) fue un filósofo alemán, una de las figuras fundadoras de los movimientos del Idealismo y el Kantismo alemanes de finales del siglo XVIII y principios del XIX.

En un momento dado, se le consideraba simplemente como un puente entre las ideas de Kant y Hegel, pero desde entonces ha empezado a ser apreciado como un filósofo importante por derecho propio, con ideas originales sobre la naturaleza de la autoconciencia. También escribió filosofía política y algunos lo consideran el padre del nacionalismo alemán.

Vida

Fichte nació el 19 de mayo de 1762 en Rammenau, en la región de Sajonia, al este de Alemania. Su familia era fabricante de cintas y demasiado pobre para pagarle la escuela, aunque desde muy pronto impresionó a todos con su gran inteligencia. Gracias al mecenazgo de un noble local, el barón Miltitz, pudo asistir al conocido internado de Pforta, que preparaba a los alumnos para la educación universitaria, y en 1780 comenzó a estudiar en la Universidad de Jena, en el centro de Alemania, y después en la de Leipzig. A la muerte de su mecenas, tuvo que interrumpir sus estudios por motivos económicos en 1784, y los abandonó sin terminar la carrera.

Trabajó durante un tiempo como profesor particular en Zúrich (Suiza), donde conoció y se comprometió con su futura esposa Johanna Rahn, sobrina del poeta alemán F. G. Klopstock, en 1790. Ese mismo año (de vuelta en Leipzig y de nuevo en apuros económicos), Fichte aceptó ser tutor de un estudiante universitario en la filosofía kantiana, de la que entonces sabía muy poco, y así comenzó a estudiar en profundidad las obras de Immanuel Kant, que iban a tener un efecto duradero en su vida y su pensamiento.

Al año siguiente, viajó a Königsberg para conocer al propio Kant, aunque parece que éste no quedó especialmente impresionado por su visitante. Pero en 1792, Fichte publicó su primera obra, preparada apresuradamente, «Versuch einer Kritik aller Offenbarung» («Intento de crítica de toda la revelación»), un libro sin firma que en un principio se supuso que era del propio Kant. Cuando Kant aclaró la confusión y elogió abiertamente la obra y a su autor, la reputación de Fichte se disparó.

Fichte siguió trabajando como tutor mientras intentaba plasmar sus ideas filosóficas en un sistema propio, que llegó a denominar Wissenschaftslehre (traducido de diversas maneras como «Ciencia del conocimiento», «Doctrina de la ciencia» o «Teoría de la ciencia»). En octubre de 1793 se casó con su prometida en Zúrich (tendrían un hijo, Immanuel Hermann, en 1797), y poco después le ofrecieron la cátedra de filosofía en la Universidad de Jena, que se estaba convirtiendo rápidamente en la capital de la nueva filosofía alemana.

Permaneció en Jena hasta 1799, publicando los trabajos académicos que establecieron su reputación como una de las principales figuras de la tradición filosófica alemana, así como obras más populares para el público en general (para cumplir su deseo de comunicar el Kantismo a un mundo más amplio). En un ensayo de 1798, Fichte sostenía que la creencia religiosa sólo podía ser legítima en la medida en que surgiera de consideraciones propiamente morales, y que Dios no tiene existencia al margen del orden moral del mundo. Esto le valió acusaciones de heterodoxia y ateísmo, y finalmente se vio obligado a abandonar Jena.

Cuando Fichte se instaló en Berlín en 1800, su reputación ya había empezado a decaer, sobre todo después de que Kant y Friedrich Heinrich Jacobi (1743 – 1819) repudiaran su Wissenschaftslehre. Para ganarse la vida, dio conferencias privadas y publicó nuevas obras, entre ellas «Die Bestimmung des Menschen» («La vocación del hombre») en 1800, aunque se resistía a publicar por miedo a ser incomprendido de nuevo. Cuando en 1810 se inauguró la nueva universidad prusiana de Berlín, Fichte fue nombrado director de la facultad de filosofía y en 1811 fue elegido primer rector de la universidad. Continuó su labor filosófica hasta el final de su vida, dando conferencias sobre la Wissenschaftslehre y escribiendo sobre filosofía política (incluso sobre una nueva forma de educación nacional que permitiera a la nación alemana alcanzar su pleno potencial) y otros temas.

Cuando estalló la Guerra de Liberación contra Napoleón Bonaparte en 1813, tanto Fichte como su esposa Johanna se alistaron en la milicia. Murió en Berlín de una epidemia de tifus el 27 de enero de 1814, a la edad de cincuenta y dos años. Su hijo, Immanuel Hermann Fichte (1797 – 1879), también realizó aportaciones a la filosofía.

Obra

Tras la publicación de algunas obras radicales en defensa de los principios de la Revolución Francesa en 1793, Fichte comenzó a trabajar seriamente en la formulación de su filosofía de la Wissenschaftslehre, que siguió revisando durante la mayor parte del resto de su vida. La concibió como una búsqueda de nuevos fundamentos para la filosofía crítica de Kant, aunque nunca como un repudio del Kantismo. Después de los «Grundlage der gesamten Wissenschaftslehre» («Fundamentos de toda la Wissenschaftslehre») de 1794/5, vinieron los «Grundlage des Naturrechts nach Principien der Wissenschaftslehre» («Fundamentos del derecho natural basados en la Wissenschaftslehre», 1796/7) y «Das System der Sittenlehre nach den Principien der Wissenschaftslehre» («Sistema de teoría ética basado en la Wissenschaftslehre», 1798). Le siguieron otras reformulaciones, explicaciones y compendios.

Fichte se dio cuenta, en gran parte como respuesta a una obra llamada «Aenesidemus» de Gottlob Ernst Schulze (1761 – 1833), de que no respaldaba el argumento de Kant sobre la existencia de los noumena («cosas en sí»), la realidad suprasensible más allá de las categorías de la razón humana, y vio la separación rigurosa y sistemática de las «cosas en sí» y las cosas «tal como se nos presentan» como una invitación al escepticismo. Sugirió radicalmente que deberíamos aceptar el hecho de que la conciencia no tiene ningún fundamento en el llamado «mundo real» ni en nada fuera de ella. Sin embargo, argumentó, la conciencia del yo depende de la resistencia de algo que se entiende como no parte del yo (su famosa distinción «yo/no yo»), es decir, la existencia de otros sujetos racionales.

En 1806, publicó «Die Grundzüge des gegenwärtigen Zeitalters» («Las características de la época actual»), empleando su Wissenschaftslehre para los propósitos de la Filosofía de la Historia, e identificando cinco etapas de la historia en las que la raza humana progresa, desde el gobierno del instinto hasta el gobierno de la razón. A pesar de los paralelismos con la posterior formulación de Hegel de la historia como proceso dialéctico (o posiblemente a causa de ellos), podría decirse que fue el propio Hegel el responsable en gran medida de la posterior relegación de Fichte a una nota a pie de página en la historia más amplia del idealismo alemán.

Fichte también originó el principio del voluntarismo racional, argumentando que el mundo y toda su actividad sólo deben entenderse como material para la actividad de la razón práctica, que es el medio a través del cual la voluntad alcanza la libertad completa y la realización moral completa.

Los últimos escritos políticos de Fichte contrastan con sus primeras obras radicales y progresistas. Desarrolló una teoría del Estado basada en la idea de la autosuficiencia (autarquía), que controlaría las relaciones internacionales, el valor del dinero y limitaría severamente el comercio con el mundo exterior. También calificó a los judíos de «estado dentro del estado» que podría «socavar» la nación alemana, y alentó la construcción de un estado nacional judío en Palestina. Sus «Reden an die deutsche Nation» («Discursos a la nación alemana») de 1807-8 en particular fueron utilizados por los círculos nacionalistas alemanes antes y durante la Primera Guerra Mundial para reforzar los sentimientos nacionales, y algunos lo consideran el padre del nacionalismo alemán.