El Valor de las Personas es un concepto amplio y complicado que muchos intentan medir de distintas formas. Para algunas personas, el valor de una persona depende simplemente de la cantidad de dinero u ofertas que se le hacen. Para otros, el valor de una persona se determina por su habilidad para aportar a la sociedad. En realidad, el valor de una persona no se puede medir en términos de dinero o de habilidades.
Para algunos, el valor de una persona se mide en términos de sus relaciones. Una persona con un gran círculo de amigos y una gran familia es considerada como una persona con un gran valor. Esta idea se basa en el concepto de que la calidad de las relaciones que uno tiene con los demás es un reflejo de la calidad de la persona.
Otro enfoque para medir el valor de las personas es ver cuán gentil, abierto y solidario es una persona. Cuando una persona ayuda a los demás sin preguntar primero si se le va a pagar, es un indicio de que es una persona generosa con valores humanos. Las personas con estas cualidades son consideradas como personas valiosas ennuestra sociedad. Además, ayudan a construir relaciones sólidas entre aquellos con los que tienen contacto.
Una última forma de medir el valor de las personas es medir el nivel de satisfacción que tienen con su vida. Esto significa evaluar cómo están satisfechos con su salud, su hogar, sus amigos y su trabajo. Aquellos que tienen un nivel alto de satisfacción son considerados como personas de valor, especialmente si hacen un esfuerzo para compartir sus experiencias con otros.
El valor de las personas es subjetivo e individual. No está restringido a la cantidad de dinero que se les ofrece, ni a la habilidad para aportar a la sociedad, ni a sus relaciones, ni a su grado de generosidad. En lugar de ello, el verdadero valor de una persona reside en cuan satisfecha es la persona con su vida. Aunque hay muchas formas diferentes de medir el valor de las personas, esto sigue siendo el elemento más importante al momento de determinar el verdadero valor de una persona..
Escrito por: Gonzalo Jiménez
Licenciado en Filosofía en la Universidad de Granada (UGR), con Máster en Filosofía Contemporánea en la Universidad Complutense de Madrid (UCM)
Desde 2015, se ha desempeñado como docente universitario y como colaborador en diversas publicaciones Académicas, con artículos y ensayos. Es aficionado a la lectura de textos antiguos y le gustan las películas y los gatos.
