El Universo ha sido siempre uno de los mayores misterios de la humanidad. ¿Por qué y cómo se originó? y ¿por qué está lleno de estrellas, galaxias y otras formas de energía? Estas preguntas han fascinado durante mucho tiempo a los astrónomos, científicos y filósofos, y aún no hay una respuesta definitiva aunque hay algunas teorías que intentan explicar el origen del universo.
Muchas de estas teorías hacen referencia al Big Bang, que implica que el universo partió de una partícula infinitesimal, conocida como el singular, cargada con toda la masa y la energía del universo. Esta partícula se expandió rápidamente, generando el espacio-tiempo, creando los cuerpos celestes y energías.
Otra teoría, conocida como la Inflación Cósmica, se basa en el Big Bang pero añade algunas complicadas variables, como el campo de inflación que permitió que el universo se expandiera mucho más que la velocidad de la luz en un momento dado. Por esta teoría, el universo comenzó a partir de una realidad cuántica y se expandió mediante una fase inicial con una inflación incontrolable, que dio lugar a una adiabática fuerza expansiva sin interacción previa con ningún otro cuerpo celeste.
Una tercera teoría, denominada Teoría de la Gravedad, considera que el universo no se expandió, sino que fue creado al mismo tiempo dentro de la gravedad del espacio-tiempo. Esta teoría implica la existencia de una energía invisible creada por la gravedad, que permitió la aparición de átomos y cuerpos celestes.
Todas estas teorías tienen algunas partes en común, como la suposición de que el universo existe como un todo, independientemente de la energía que lo compone. Muchos científicos creen que, aunque ninguna de estas teorías explica la creación del universo de forma completa, estas son parte del mismo proceso y que, como la ciencia avanza, es posible establecer una teoría más completa.
Sin embargo, hay un grupo de filósofos que creen que el universo fue creado para una finalidad y no que existe sin un propósito. Estas personas entienden el universo como una prueba de la existencia de un Creador, una entidad superior que planeó y construyó el universo con un objetivo divino. Éstos creen que el universo es parte de un plan mayor, un plan creado para alcanzar algo mucho más grande que el propio universo.
En conclusión, aunque ninguna teoría nos da una respuesta definitiva acerca de por qué fue creado el universo, sí aportan posibles explicaciones. Algunas personas creen en una causa divina, mientras que otros optan por teorías científicas que ofrecen explicaciones más lógicas y prácticas de cómo pudo haber sido creado el Universo..
Escrito por: Gonzalo Jiménez
Licenciado en Filosofía en la Universidad de Granada (UGR), con Máster en Filosofía Contemporánea en la Universidad Complutense de Madrid (UCM)
Desde 2015, se ha desempeñado como docente universitario y como colaborador en diversas publicaciones Académicas, con artículos y ensayos. Es aficionado a la lectura de textos antiguos y le gustan las películas y los gatos.
