Término acuñado por Paul Ricoeur en 1965 que se refiere, principalmente, a los tres autores que con mayor profundidad realizan una crítica radical de toda la tradición occidental: Marx, Nietzsche y Freud. Desde perspectivas muy diferentes estos autores consideran que la conciencia, en su conjunto, es una conciencia falsa. Para Marx la conciencia se falsea o se enmascara por intereses económicos, en Freud por la represión del inconsciente y en Nietzsche por el resentimiento del débil. De esta manera, el sujeto no es visto como un ser completamente autónomo, sino que se halla sometido a condicionamientos históricos, so ciales, morales y psíquicos. Los tres tienen en común la denuncia de las ilusiones y de la falsa percepción de la realidad (la realidad no es como nos la habían contado), pero también la búsqueda de una utopía.